Lanzamiento PLF

[Fácil] Las 4 etapas de un lanzamiento PLF

Seguro que te ha sucedido.

Estabas navegando por YouTube, Facebook o Instagram y te ha aparecido el anuncio de una persona que te invitaba a su entrenamiento gratuito de 4 días.

Era una persona que te contaba que ya había logrado lo que tú buscas y que te puede enseñar cómo tú también puedes lograrlo.

Así que haces clic y te apuntas. Porque si alguien hace esto y encima gratis, cómo lo vas a dejar pasar.

¿Entrenamientos Gratuitos? Hay dos clases que debes conocer

Mira.

Para seguir leyendo este email quiero que dejes a un lado a todas esas personas que solo quieren vender con estos vídeos.

Lo sé, lo sé. El objetivo final siempre es vender. Pero hay dos formas de hacerlo: la buena y la mala.

La mala es cuando solo te quieren vender —y te pondría ejemplos muy fácil—, la buena es cuando, aunque no compres, te vas con la sensación de no haber tirado tu tiempo.

Nos quedamos con los segundos. Con los buenos. Con aquellos con los que da gusto disfrutar —yo a estos me intento apuntar siempre—.

Aunque a día de hoy cada vez funcionan menos porque el mercado se ha saturado de este tipo de estrategias, es importante que los mantengas en la mente.

Al fin y al cabo, se trata de una estructura que puedes replicar en otro tipo de formatos —desde un post hasta un vídeo de YouTube—.

#1 Problema.

La primera clase de estos entrenamientos siempre es el problema.

La persona que hay al otro lado dedicará todo el tiempo que haga falta a presentarte el contexto en el que vives y a convencerte de que tienes que pasar a la acción ya.

Esta parte es fundamental. Muchas veces ya somos conscientes de la situación, pero necesitamos ese pequeño empujón.

Por eso se dan datos, cifras, estadísticas… todo para demostrarte que ha llegado la hora de actuar.

#2 Vehículo.

Hasta ahora no le has presentado tu solución. Tan solo le has contado cuál es el problema que tiene. 

Ahora que ya es consciente de la situación y que sabe que tiene que actuar lo antes posible, le presentas el vehículo.

El vehículo es tu solución. Aquello que le llevará del punto A al punto B. Tu producto o tu servicio.

Además de ello, en este apartado es fundamental que especifiques que es para una persona como él —tu avatar—.

De este segundo vídeo tiene que salir convencido de que puede cambiar de vida.

#3 Sistema.

Aunque en el apartado anterior le hayas presentado el vehículo, ahora necesitas convencerle de que puede lograrlo.

Un problema muy habitual es que, pese a que tu cliente potencial conoce cuál es la solución, piensa que es demasiado complicada para él.

Así que vamos a sistematizarla.

Esto consiste en establecer una serie de fases que te permitan explicar paso a paso cómo podrá conseguir lo que desea.

No entrarás demasiado, solo lo suficiente para que lo entienda. Por decirlo de un modo claro, no le darás el pez, solo le enseñarás a pescar. El pez es lo que estás vendiendo.

Este es uno de los momentos más delicados de todo el proceso. Si le das demasiado poco y lo considera algo imposible, no querrá continuar. Pero si calibras lo suficiente y lo encuentra una oportunidad, ahí es donde hay que jugar las cartas.

#4 Venta.

Esta es la parte que tiene menos misterio. Si lo has calentado bien, estará deseando comprarte. Así que eso es lo que toca.

Pon delante de sus morros esa oferta que has preparado para él y emplea las tácticas persuasivas para convencerle de que te dé el sí, quiero.

Si hasta aquí ha ido bien, será muy probable que consigas estas ventas. Por eso es tan importante que trabajes todas y cada una de las fases del proceso, no solo esta.

Con estas cuatro etapas tienes más que suficiente para preparar un lanzamiento. 

Si te gustaría conocer más detalles al respecto y que amplíe información, tan solo tienes que decírmelo. Todo esto te puede servir en muchos contextos.