Así funciona el puente de la epifanía

💥 El Puente de la Epifanía y los 2 Secretos para Vender

Si quieres vender algo, necesitas que lo que cuentes cree una emoción  tan grande, que tu cliente pase a la acción.

Es importante entender que no puedes obligar a nadie a comprar, la clave está en que a ellos mismos les surja la idea.

De esta manera la idea de comprar saldrá de ellas, no de ti. Por lo tanto, no tendrás que venderles nada.

El puente de la epifanía es una historia que le cuentas a la persona através de una experiencia emocional por estar enseñándola a ellos.

Lo importante es entender que la lógica no vende, las emociones sí.

Por lo tanto, para poder contar esta historia necesitas volver atrás y entender qué te hizo a ti creer en la nueva oportunidad. Esa historia llenará el espacio de lo emocional a lo lógico.

La primera pregunta es:

¿Cuál es el núcleo de tu puente de la epifanía que les convencerá de la única cosa que estás compartiendo con ellos?

Storytelling efectivo

¿Alguna vez te has dado cuenta de que una misma historia puede ser contada por dos personas diferentes y el resultado puede ser tremendamente diferente?

La primera clave para contar historias es la simplificación. Necesitas utilizar un lenguaje que cualquier persona pueda entender.

Russell Branson habla de un experimento que se realizó durante las elecciones primarias de 2016. Cuando se estudiaron los discursos, resultó que el más adictivo y simple era el de Donald Trump.

Sin embargo, una de las dudas más habituales para hacer esto es qué sucede cuando se presenta un nuevo concepto o uno más complejo.

En ese caso hay que utilizar la herramienta «es como…».

Básicamente consiste en explicarles ese producto o servicio con algo que les sea familiar.

Por ejemplo, cuando Steve Jobs presentó el iPad contó que era como un ordenador, pero con todas las ventajas del iPhone.

¿Te has quedado con alguna pregunta?

Como siempre te digo, este es tu momento.

Si después de ver el vídeo te has quedado con cualquier duda, tan solo dímelo en los comentarios.

¡Para mí será un placer echarte una mano!