¿Sabes esa sensación de haberlo conseguido? Después de mucho pelear contra las inclemencias —y las zancadillas de alguna que otra empresa—, ya puedo decir que escribo la primera reflexión desde mi nuevo hogar. En un rato llegará el podcast, la clase y el primer vÃdeo de YouTube.
Estoy instalado en la habitación que he habilitado para todas estas tareas, mientras me percato de que la mesa está un poco coja. No sé si le habré dado un golpe o algo en la mudanza, pero es una de esas cuestiones que estarÃa bien arreglar.
A mi vera, justo encima de la mesa, me acompaña una antigua radio que sigue captando la señal. Sus pilas funcionan, a pesar de que hace más de tres años que nadie la enciende. Era de mi abuelo y es importantÃsima para mi motivación.
Necesitamos recordar que el tiempo pase
DecÃa una vez Jaime Altozano que en su escritorio siempre habÃa una calavera que le recordara que el tiempo pasara y que cada oportunidad que dejara escapar podrÃa no volver. Mi radio es esa calavera.
Mi abuelo murió hace varios años y me dejó un gran vacÃo en el corazón. Para mà siempre fue la persona más importante, pero también por la que más pelee durante el espacio de vida que compartimos.
Le llamaba cada dÃa al volver de la Universidad —porque él no llegó a encontrar mi vertiente más laboral— y recuerdo que me decÃa que trabajaba mucho, pero que si querÃa convertirme en alguien en el dÃa de mañana era importante sacrificarme ahora.
Y eso es lo que hago. Seguir lo que él me enseñó. Seguir sacrificándome cada dÃa. Y esa radio es el sÃmbolo que me recuerda por qué lo hago.
Los sÃmbolos son importantes
Nos ayudan a creer y a seguir. A ser nosotros y querer superarnos. A recordar quiénes somos y quiénes queremos llegar a ser.
Por ello es tan importante que cada uno encontremos los nuestros. Una razón para avanzar y una razón para no desviarnos.
Nunca he sido creyente, pero desde que se fue hay una parte de mà que desea que haya algo allá arriba donde le estén cuidando.
Yo no sé si él seguirá en alguna parte, pero tengo seguro que irá siempre conmigo.
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